¡Un mismo paso, dos estilos diferentes!

Muchas veces ocurre que un mismo paso puede ser ejecutado de diferentes formas, dependiendo del estilo del bailarín, de su experiencia, del lugar donde se encuentre, de lo se acomode mejor a su cuerpo y sobre todo de la intención o emoción que el bailarín quiera darle al paso.
Recuerdo que un día llegó a la escuela un joven adulto desde la ciudad de Piura para bailar con mi alumna, al observarlo noté que sus laterales eran diferentes a los míos y a los que estaba acostumbrada a ver en concursos, no podía dejar de verlos porque llamó mucho mi atención, eran con las piernas dobladas y medio atonderado, él se veía tan cómodo e identificado con sus laterales que fluía en el espacio de baile con una naturalidad y alegría única, ahí noté la belleza que puede tener un mismo paso en distintos cuerpos, comprendiendo que cada bailarín se apropia de cada paso según el entorno en el que se encuentre, terminó de bailar y le dije que tenía unos hermosos laterales.
Esta experiencia me marco, pues abrió mi mente a muchas más posibilidades, reconociendo que cada persona es diferente a la otra, y que cada bailarín tiene una voz única que se manifiesta en sus movimientos, no por ver un paso realizado de forma diferente a la tuya significa que está mal ejecutado, tenemos que ver todo el contexto para entenderlo y sobre todo respetarlo, si logras ver en el paso naturalidad y provoca en ti alegría, haz descubierto otra forma de hacer el paso, si lo haces o no es tu decisión, o si partes de él para hacer tu propio paso también está bien, lo importante es que seas tú !
Te invito a abrir tu mente y descubrir nuevas formas de hacer un mismo paso, te aseguro que apreciarás mucho más nuestra hermosa marinera y su diversidad.
Gisela Gonzales